Las habilidades principales en el póquer
¿Cómo convertirse en un jugador fuerte en el póquer? ¿Qué habilidades son especialmente necesarias para ganar en el póquer? A menudo, los consejos que recibe el jugador se reducen a que hay que jugar de una forma agresiva y no pulverizarse para jugar muchas manos. Sin embargo, este concepto es muy vago e incierto. Así que echemos un vistazo a lo que, en nuestra opinión, son las cuatro habilidades básicas y necesarias para un jugador profesional del póquer.
Habilidad número 1. Calcular matemáticamente las probabilidades.
El jugador profesional no sólo espera la suerte. Conoce bien las probabilidades básicas y es capaz de calcularlas a medida que cambian durante el juego. Por ejemplo, si usted tiene una pareja, la oportunidad de recoger el set es 1 a 8,5. Y si usted tiene fleshdrop en el flop, la oportunidad de recoger el color en el river es aproximadamente 1 a 3.
No importa cuál sea el estilo del jugador, en cualquier caso no se puede desatender los "outs" que son las cartas que pueden mejorar su mano. Los porcentajes de probabilidad de mejora pueden ser calculados con una fórmula simple: cuente sus "outs", los multiplica por dos, agrega la unidad de porcentajes.
Habilidad número 2. La disciplina en el póquer.
Un mal jugador del póquer, como muchos saben, se llama el pez. ¿En qué se diferencia el pez del jugador profesional? El pez no espera ganar, sino espera tener suerte. Un profesional siempre está en busca de ganar y no se confía de la suerte, y cuenta con la mala suerte de su adversario. Esta tranquilo y trata de ser más relajado, trata de jugar con la cabeza fría, no acusa a nadie por sus faltas, pero intenta aprender de ellas. Y, por supuesto, comprende que las diferentes variaciones de póquer requieren diferentes estilos.
Habilidad número 3. La psicología en el juego del póquer.
Es necesario evaluar, no a uno mismo sino a los oponentes. Un jugador profesional siempre está analizando el juego, trata de adivinar que cartas tienen en la mano su rival, y por supuesto, está tratando de comprender lo que su oponente piensa de él. Habilidad psicológica en el póquer es intentar ponerse en el lugar de su oponente y entender su estrategia, basada en una comprensión de sí mismo.
Habilidad número 4. La comprensión de los riesgos y beneficios.
Un buen jugador sabe que el mundo no se limita a una sala para jugar al póquer. Por lo tanto, es importante el cálculo de su capacidad financiera, cuánto dinero pone no sólo en el juego, sino también en la vida cotidiana. Y nunca confunde su Bank roll con el dinero que debe pagar el alquiler.
El riesgo es bueno, pero no todos saben arriesgarse correctamente mientras están sentados en la mesa de juego. El riesgo deberá estar basado en un cálculo frío.
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